MENDOZA.- El senador Ernesto Sanz (Mendoza) sostuvo que la presidenta, Cristina Fernández, tiene una oportunidad histórica de retomar la agenda que la llevó al poder en el 2007 e insistió en reclamar que deje de lado la confrontación.

Sanz, presidente de la Unión Cívica Radical (UCR), observó que la muerte de Néstor Kirchner ha dejado un vacío muy importante en la política y dijo que, aunque ha sido duro en algunas críticas contra el ex mandatario, admitió que Kirchner ayudó a recuperar el espacio de la política. "Ahora el gran desafío del país es construir una agenda, no de confrontación, sino una agenda de recuperación institucional", insistió el líder del radicalismo. Luego manifestó que la muerte no puede significar que en 24 horas uno cambie de parecer. "Lo que sí la muerte trae aparejado es el inmediato respeto por el dolor y la inmediata bajada de banderas de lucha porque no es el momento", explicó el parlamentario.

Por su parte, la líder del GEN, Margarita Stolbizer, fue un poco más allá y planteó la necesidad de un gobierno de concertación por lo que le pidió a Cristina que convoque a todos los sectores políticos, económicos y sociales.

"Ni el oficialismo ni la oposición pueden quedar estancados en el análisis de la coyuntura ni haciendo futurología sobre el futuro sin Néstor Kirchner", enfatizó Stolbizer y aclaró que la Concertación no es renunciar a principios ni ideas, ni siquiera a los intereses propios de los grupos sectoriales, ni a la lucha por el modelo de país. "Concertación es poner por sobre esas posiciones la búsqueda de un horizonte común trabajando para alcanzar el progreso de la sociedad en su conjunto. Cristina y Néstor Kirchner prometieron la Concertación en el 2007 y esa es la deuda de la política. Este es el momento de cumplir el compromiso electoral", enfatizó Stolbizer.

En la Coalición Cívica dijeron que no tienen expectativas ni prejuicios de que el Gobierno nacional cambie y que el escenario político es muy fluido. Afirmaron que la CC buscará intensificar el trabajo interno con miras al 2011, evitar conjeturas y estar alerta a la próxima jugada del oficialismo. (NA-DyN)